Las Vegas es célebremente reconocida como una ciudad de pecado, vicio y degradación. No obstante, esas palabras están lejos de asustar a quienes disfrutan de la adrenalina provocada por una buena apuesta. La actividad deportiva, que para muchos es justo lo opuesto al pecado, el vicio y la degradación, es, irónicamente, uno de los mayores alicientes para las apuestas en la soleada y divertida localidad.
Hoteles como el Bellagio, el Luxor y el Caesar’s Palace son para muchos sinónimos de confort, lujo y máquinas tragamonedas. En ellos, los aficionados y conocedores de las cuitas deportivas pueden obtener jugosas ganancias mientras disfrutan un martini o se relajan junto a las piscinas de estos paraísos de mármol.
Como era de esperarse en una de las ciudades más representativas de Estados Unidos, la mayoría de las apuestas en Las Vegas giran en torno al futbol americano. Durante los meses fríos, que coinciden con la temporada de la NFL, miles de fans del deporte se congregan en bares y casinos de la ciudad para apostar por sus equipos y jugadores favoritos.
Uno de los mejores lugares para realizar apuestas de futbol americano es el Hotel Palazzo. Este lugar, lleno de lujo y referencias a la arquitectura renacentista italiana, tiene restaurantes plagados de pantallas donde los aficionados pueden observar los partidos para realizar sus apuestas en tiempo real.
Además, ofrece la oportunidad de apostar mientras se degusta una bebida o una suculenta rebanada de pizza. Aquellos que quieran apostar en un lugar con el encanto de los mafiosos que fundaron la ciudad, solo tienen que visitar los restaurantes de este lujoso complejo.
Quienes deseen apostar en un resort diseñado para emular un paraíso tropical, tienen una excelente opción en el hotel Mandala Bay. Con más de 300 pantallas en sus instalaciones, el Mandala Bay ofrece bebidas gratis para quienes apuestan en carreras de caballos. Durante la temporada de futbol, ofrece también restaurantes donde es posible deleitarse con una hamburguesa condimentada al mejor estilo estadounidense.
Las 62 pantallas del Caesar’s Palace ofrecen otra rica oportunidad para que los apostadores sigan a sus equipos en tiempo real. Pensadas para simular una sala de cine, en estas pantallas se le permite a los espectadores ordenar comida desde sus butacas para no perder un solo minuto de los partidos a los que han realizado sus apuestas. Este salón está además adyacente a una sala de póker, lo que permite alternar entre las cartas y los deportes a voluntad.
Finalmente está el Bellagio, un paraíso de lujo donde cada loseta es de mármol y los acabados de chapa de oro. El contraste entre los candelabros y las pantallas planas hace de apostar aquí una experiencia verdaderamente surreal. Aquí no hay hamburguesas ni rebanadas de pizza, tanto la comida como la bebida son de primera calidad; esto es Montecarlo con los Vaqueros de Dallas en televisión.
Además de estas opciones, en Las Vegas hay otros espacios en donde es posible apostar al tiempo que se disfruta de un partido en tiempo real. La mayoría cuentan con comida y bebida, y algunos ofrecen promociones para sus apostadores más arriesgados. Lo importante de en las apuestas deportivas de Las Vegas es arriesgarse y pasarla bien.
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