El martes 19 de febrero de 2019, el Olympique de Lyon se enfrentó al F.C. Barcelona en el Parc Olympique Lyonnais. En el papel, la escuadra de Lionel Messi partió como amplio favorito para ganar el partido.
En ocasiones como ésta, cuando las diferencias entre dos equipos son considerables, los apostadores pierden el interés, ya que, si apuestan por el favorito, el monto a ganar es mínimo, y si se arriesgan a apostar por el que no es favorito, lo más probable es que perderán su dinero.
Las apuestas de handicap funcionan para nivelar estos encuentros, otorgándole una ventaja al equipo que no es favorito. Dicha ventaja se sumará al resultado final.
Por ejemplo, supongamos que para el Barcelona vs Lyon hay un handicap de -2/+2. Esto significa que al equipo favorito se le restarán dos goles, o, lo que es lo mismo, se le sumarán dos goles a la escuadra débil. Si el Barcelona gana 1-0, el resultado verdadero para la apuesta sería de 1-2, favor Lyon, porque se le sumó su hándicap (+2). Quien haya apostado por Lyon, ganaría el juego.
En este mismo ejemplo, para que pudiera ganar alguien que apueste por el Barcelona, el cuadro catalán tiene que ganar por, mínimo, 3 goles de ventaja. Con un marcador de 3- 0, el resultado verdadero para la apuesta sería de 1-0, porque se le restó el handicap (-2). Aún así, el Barcelona se sigue llevando la victoria, y quien haya apostado por ellos, también.
Existe una versión muy popular llamada handicap asiático, cuyas reglas son similares, pero manejan dos handicaps con el objetivo de eliminar la posibilidad de un empate.